Desde un panorama general, en las dos últimas décadas de historia como nación, la educación matemática en Colombia desde sus primeros años de escolaridad, ha propuesto enfrentar distintos problemas de orden académico y curricular en torno a la enseñanza y el aprendizaje, impulsando en cierta medida la necesidad de reformar, o más bien, de lograr construir una propuesta curricular que fuese capaz de soportar un cambio de ruta.